Si me dijeran que narre el comienzo de la vida en este rincón del mundo desde el punto de vista evolucionista y de forma irónica partiría de este breve recorrido que Eduardo Galeano escribe en su web:
http://images.google.com.pe/imgres?imgurl=http://astrorosas.blogia.com/upload/siluete_kid.jpg&imgrefurl=http://astrorosas.blogia.com/temas/del-mundo-y-su-azul-humanidad.php&h=235&w=189&sz=6&hl=es&sig2=4GEKNxFaglJ4-mHwfUvErg&start=10&tbnid=4Mgv37XKOFhBhM:&tbnh=109&tbnw=88&ei=Kw_NRfPnArDIaOOdgckC&prev=/images%3Fq%3Dhumanidad%26svnum%3D10%26hl%3Des
Vaya que es grande la dirección, pero espero lean su contenido denominado “palabras”.
Hace unos 15 millones de años, según dicen los entendidos, un huevo incandescente estalló en medio de la nada y dio nacimiento a los cielos, a las estrellas y a los mundos.
Hace unos 4 mil o 4 mil quinientos millones de años –años más, años menos-, la primera célula bebió el caldo del mar, y le gustó, y se duplicó para tener a quien convidar el trago.
Hace unos 2 millones de años, la mujer y el hombre, casi monos, se irguieron sobre sus patas, alzaron los brazos y se miraron cara a cara…
Hace unos 450 mil años la mujer y el hombre frotaron dos piedras y encendieron el primer fuego que los abrigó del invierno y les permitió cocer las presas cazadas.
Hace unos 300 mil años, la mujer y el hombre se dijeron las primeras palabras y creyeron que podían entenderse. Y en eso estamos aún, queriendo ser dos, muertos de miedo, de frío y buscando palabras.
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